R U R I   E T   O R B I
(De la aldea al universo)

 
   
    No recuerdo el autor, sí la frase: Las civilizaciones mueren en las ciudades y nacen en los pueblos. Relacionada con la aldea está el famoso poema de Fray Luis de León: ¡Qué descansada vida la del que huye del mundanal ruido...! También las faenas agrícolas y la frase latina: La agricultura es la profesión del sabio, la adecuada al sencillo y la propia de todo hombre libre.

    Mi madre usaba la frase: Salí de casa y avergonceme, volví a casa y arregleme. Hacía referencia a pedir a un vecino una herramienta, ponerle éste disculpas, regresar a casa hacer unas reparaciones y salir del paso. En el plano figurado, o real, yo intenté varias veces asentarme en la ciudad sin conseguirlo, regresé y me he sentido realizado.

    No pretendo denostar ni denigrar la ciudad. En ella aprendí cosas que no hubiese sido capaz de hacerlo de no haber estado en ella; pero más aprendí en el pueblo, tal vez por la mayor estancia y también por ser un pueblo singular, sin que se entienda esto como vanidad, los hechos cantan. Pero sí quiero revalorizar la aldea, tantos años olvidada y aún hoy marginada, ni tener que oír la palabra "pueblerino" en tono peyorativo, como la oí en mi infancia y juventud, hoy hubiese contestado: soy de pueblo a mucha honra.
 
    La ciudad material y económicamente es más eficiente, pero no todo en la vida es dinero. Desde luego que ha sido el lugar donde se concentraba el poder y el saber, pero las paradojas existen. Hoy día se dan más intercambios entre el pueblo y la ciudad y la mayoría positivos. Muchas personas alternan su tiempo entre los dos ambientes, las comunicaciones tanto en el transporte, como de noticias son más rápidas. En definitiva no se trata de una disyuntiva si no de una suma. Para mencionar el pequeño planeta en el que vivimos de una manera sencilla y sostenible lo nombramos como La Aldea Global.
 
    Del pueblo puede y debe salir un mensaje en conductas y palabras de sencillez, cuidado del medio ambiente, de tolerancia, de justicia, de sinceridad, de autenticidad, de ilusión y de creer en una humanidad con un enorme futuro y llena de esperanza.
 

Honorino Joaquín Martínez