"Nos D. Francisco Gutiérrez Vigil, Obispo de Astorga, ...... concedemos licencia a D. Antonio García, Párroco de Santibáñez de la Isla, para la construcción de una iglesia de nueva planta en su parroquia".

Era el año 1.797; el pueblo necesitaba un lugar que ofreciera mayor facilidad para acudir a celebrar el culto. El desplazamiento progresivo del pueblo había hecho que la vieja iglesia quedara como testimonio silencioso de una ubicación antigua, a más de un kilómetro de distancia, y con la única compañía de un puñado de olmos.

Pero D. Antonio no pudo ver concluida la obra de sus sueños. En ella había puesto todo su empeño y cariño. El año 1815 fallece a los 53 años y lega en testamento "12.000 reales para continuar la obra". Estaba casi terminado el "cuerpo de la iglesia".

Comienza a utilizarse en el año 1816 pero el crucero está aún por construir. Fue en el año 1817 cuando, gracias al legado de D. Antonio, se construye éste y la torre; sabemos que los jornales de la misma ascendieron a 18.940 reales y 24 maravedíes.

La iglesia es una construcción en planta de cruz. En sus líneas destaca, sin duda, la esbeltez y las proporciones armoniosas, rematadas por una torre de espadaña de 23 metros de altura, orgullo de Santibáñez y reproducida en múltiples expresiones culturales de sus gentes.

La parroquia está dedicada a la Virgen en su advocación de Nuestra Señora de la Expectación

El deseo, lector amigo, de no abrumarte con muchas fechas y datos hace que esta reseña sea así de breve.. No obstante es posible que te guste encontrar aquí algún dato curioso. ¿Sabes cuánto importaba un jornal por estas fechas? Ahí va: el de un "maestro albañil cinco reales y medio y el de un peón entre dos y medio y tres y medio reales".

¿Te ayudamos a refrescar la memoria? ¿Quieres un dato histórico?

El rey Carlos III prohibió en 1787 por Real Cédula la inhumación de los cadáveres en los templos, decretando, por tanto, la obligación de enterrar en los cementerios. Este decreto se llevó a la práctica de manera progresiva de tal forma que tardó cerca de un siglo en cumplirse en su totalidad. Pues bien; en Santibáñez comenzó a cumplirse en 1822; y se utilizó como cementerio, y se sigue utilizando hasta hoy, el recinto de la antigua iglesia ya totalmente desmantelada, incluso ya sin cubierta, dado que algunos materiales se habían traído para la nueva..

Gracias por dedicarnos unos minutos de tu tiempo leyendo estas líneas. Nuestro pueblo, como dice la página principal, ni siquiera está en el mapa. Pero es el nuestro y lo queremos. Esto es sólo el testimonio de ese cariño que nos ha llevado a conocer muchos más datos que podemos facilitarte si nos los pides a la dirección abajo indicada:

parroquia@santibanezdelaisla.com

José Luis Fernández, sacerdote