T E M P L O

 
   
    Templo es un lugar dedicado al culto, donde se reúnen los adeptos de una determinada religión a realizar ritos, plegarias, etc. Y suele estar al cargo de personal religioso.
 
    Las primitivas sociedades y los actuales aborígenes o tribus recónditas consideran sagrados ciertos parajes naturales, bosques en su mayoría. No es de extrañar que los templos grecorromanos en su exterior estuviesen rodeados de columnas.
 
    Con el paso de las sociedades recolectoras y trashumantes a las sedentarias, el lugar sagrado pasó a ser un edificio y la persona encargada de los ritos pasó a ser de dedicación plena (funcionario o profesional de alto rango).
 
    El templo sería el lugar donde se aplacan las fuerzas sobrenaturales, donde los humanos piden favores a la(s) divinidad(es).

    Ciñéndonos al contexto cristiano, el mismo Jesucristo tiene una relación ambigua respecto al templo. Dentro solía leer textos de los profetas judíos, del templo expulsó a latigazos a los mercaderes por materialistas. Por otra parte a la samaritana que le preguntaba dónde se debía alabar a Dios, le responde que llegará el día en que ni en el monte (samaritanos) ni en Jerusalén, es decir el templo (judíos).
 
    Dice que donde se reúnan dos en mi nombre, allí estaré yo con ellos, no explica que tenga que ser en un templo o que uno de ellos tenga que ser un sacerdote. Cuando reces, sigue diciendo, no hagas como los fariseos que en la delantera del templo dan grandes voces, tú enciérrate en tu casa para rezar y Dios te oirá. También designa a cualquier persona templo donde habita la divinidad. En otra ocasión sus discípulos elogiaban la construcción, los adornos y exvotos del templo, Él no les dio excesiva importancia y predijo su destrucción.
 
    Hay un dicho muy conocido que dice "vox populi, vox Dei": Voz del pueblo, voz de Dios, no se menciona que esa voz tenga que expresarse en un templo y cierto que esa voz comunitaria solo es escuchada cuando conviene al clero, ya que a la jerarquía no le simpatizan las decisiones democráticas, solo ellos se creen los intérpretes e intermediarios entre la divinidad y los fieles seglares.

    No estoy descalificando los recintos religiosos, pues protegen de la intemperie y del ruido exterior, pero si soy contrario a edificios claustrofóbicos, oscuros, desmesuradamente apabullantes y que dan la impresión de ser lugares donde el clero es plenipotenciario.
 
    Como dije en pública reunión, no hay que confundir el envoltorio (templo) con la esencia de los valores evangélicos, donde estos se practiquen allí habrá un templo. La tierra y el universo sagrados templos son.

 

Honorino Joaquín Martínez