Poema
Son infinitas las maneras
de contar una historia,
yo, sin embargo,
no me canso de contarte
a tu pesar
mil historias de la misma manera
y a veces no te creo
cuando me dices
a mi pesar
que siempre te cuento
la misma historia y de la misma manera.
Martes 6 h. A.M. Primavera
Amanecer. Anochecer.
Llevo cuarenta años mirando
y a veces me pregunto si consigo ver.
Aún es de noche.
Y sin embargo espero ante la ventana
el milagro celeste de la luz
que hace que la montaña se ilumine
que los colores de los campos se desperecen
o que las nubes me digan dónde están
Y creo conocer el secreto
y la esencia del mundo
y me asusta de repente
el primer rayo de luz
que me traspasa
que me hace temblar
como un terremoto
repentino
siniestro, sin escapatoria alguna
ante la certeza
de quien sabe que el que conoce
el secreto de la serpiente
muere por su veneno.
Y me tranquilizo pensando
que no tardará mucho en anochecer.